miércoles, 31 de diciembre de 2008

Argentina: Dictadura de Juan Manuel de Rosas

Antes de la dictadura de Juan Manuel de Rosas, Argentina vivía tiempos de guerra debido a las guerras civiles entre federales y unitarios que luchaban por el control del gobierno y de la economía del país. De cualquier forma, y con el triunfo de los federales, durante los años 20 del siglo XVIII el principal objetivo era la unificación del país, y por tal motivo Juan Gregorio de las Heras reunió el Congreso.
Las guerras entre unitarios y federales continuaron, y en medio de esta situación Juan Manuel de Rosas asumió el poder en 1835 bajo la condición de que se le conceda la “suma del poder publico” que es la representación y ejercicio de los tres poderes del estado por parte de su gobernador, por el tiempo que el quiera. Además, Rosas asume el poder con dos compromisos principales: conservar, defender y proteger la religión Católica y sostener la causa nacional de la Federación Argentina. Por presión de los rosistas, en el plebiscito convocado antes del gobierno de Rosas todos los habitantes que podían votar fueron obligados a votar, y de los siete mil votos, menos de diez eran en contra.
Lo primero que hizo Rosas fue eliminar de todo cargo publico a opositores, y como requisito para trabajar en el gobierno o en el estamento militar tocaba ser federal.
En cuanto a economía, Rosas impuso la Ley de Aduanas, que económicamente resulto muy beneficiosa para Argentina, pues implicaba la prohibición de importación de algunos productos, impuestos para otros y además impuestos muy bajos para la importación de productos que no se consiguen en Argentina. A pesar de que las importaciones disminuyeron, el comercio interno se fortaleció de forma notable y la economía empezó una etapa de progreso.
El gobierno de Rosas además se caracterizo por el un control máximo de gastos, mantener el gasto fiscal sin emisiones de moneda ni endeudamiento, el no pago de la deuda externa y la clausura del Banco Nacional, que estaba controlado por comerciantes ingleses y continuamente aumentaba la inflación por emisiones de dinero. A cambio de este Banco Nacional, Rosas creo el Banco de la Provincia de Buenos Aires.
Sin embargo, el gobierno de Rosas no estuvo desprovisto de inconvenientes , por ejemplo el bloqueo económico por parte de los franceses, que a pesar de que hizo que Rosas aumentara notablemente el numero de opositores, logro que Francia lo reconociera como la Confederación Argentina y lo tratara de igual a igual.
Finalmente, con la creciente oposición y guerras con otros países, fue uno de sus “amigos” Juan José Urquiza, que con ayuda de sus opositores y Brasil, lo derroto, y por lo tanto renuncio el 3 de Febrero de 1852.
A pesar de épocas sangrientas como el Terror de 1840 y varias guerras civiles, el gobierno de Rosas sirvió sin duda en el proceso de consolidación de Argentina como una nación, ya que de alguna forma, además de progreso económico, dio estabilidad política y una figura de poder nacional y única.

Historia de Colombia en el Siglo XIX

El siglo XIX en Colombia se caracterizó por ser un siglo en el que muchas cosas cambiaron y en términos generales empezó el desarrollo como nación. Sin embargo, durante esta época, con la consolidación de los partidos Liberal y Conservador, se mantuvo siempre un ciclo en el que se hacían reformas y el siguiente gobierno las deshacía.
La primera mitad de siglo se puede describir como una época de recuperación y positivismo, cuyos lideres fueron los precursores de los partidos políticos, entre ellos Santander, José Maria Obando, José Hilario López y Mariano Ospina Rodríguez, entre otros.
El primer cuarto de siglo esta marcado por la Gran Colombia, que logro incluso ser reconocida por Estados Unidos y Gran Bretaña, iniciar el proceso de abolición de la esclavitud, limitar el poder del Estado y de la Iglesia y fomentar la libertad individual. Finalmente, y como es de esperarse, la Gran Colombia se disuelve debido a las dificultad en las comunicación, la gran extensión del territorio y las diferencias sociales, económicas y culturales de las naciones que la componían. Esto, sumado a los errores que Bolívar cometió gobernando y las rivalidades y desconfianzas, fueron los factores determinantes en la disolución de la Gran Colombia.
En el segundo cuarto de siglo empezó con poca estabilidad política, tanto que en casi dos años tres presidentes ocuparon el cargo, y uno de ellos, Santander, fue nombrado in absentia, y su gobierno se caracterizo por la disminución del gasto militar, el fomento de la educación y un gobierno solvente, en términos relativos, pues era una economía donde el terreno que hacia que las exportaciones no pudieran competir por los altos costos de transporte que de igual forma aumentaban los precios de las importaciones, y donde el PIB per. capita apenas ascendía a 1.4 pesos. Además, una sociedad extremadamente clasista y conformista, debido al poco esfuerzo que tocaba hacer para cumplir con las necesidades mas básicas.
La segunda mitad de siglo se caracterizo principalmente por el cambio a una constitución federalista y la lucha especialmente prolongada (debido a que ambos tenían cantidades de poder muy similares) del Estado y la Iglesia, sin embargo, en 1861, Mosquera ocupa Bogota y liquida todas las propiedades eclesiásticas que, mal vendidas, tuvieron un valor de 4 pesos per. capita. No obstante, esto tuvo un impacto muy poco notorio en la economía y en cambio los servicios sociales y educacionales que ofrecía la Iglesia se perdieron.
Con la nueva constitución de 1863, con el nuevo nombre de Estados Unidos de Colombia, de adoptó un federalismo radical, así como la abolición de la pena de muerte, la libertad de palabra, la libertad de porte y comercio de armas y un periodo presidencial de apenas dos años.
Después de varios años de dominio político por parte de los liberales y en consecuencia la consolidación del capitalismo, del laissez faire y del ascenso de la burguesía, asciende un conservador al poder, sube aranceles y pone en marcha el proteccionismo económico, se reestablece la pena de muerte y se quita el sufragio universal masculino.
Finalmente, la inflación debida en un pequeño porcentaje al exceso de billetes impresos por el Banco Nacional, y en gran parte debida a las pugnas entre liberales y conservadores y sus guerras, que estallaron finalmente en la Guerra de los Mil Días a final de siglo, dejan al país una vez mas muy inestable económica, social y políticamente.